Como todos sabemos hoy en día una de las formas más populares (y fáciles) de escuchar música es usando plataformas de streaming, entre las más populares están Spotify, Apple Music, Tidal, Deezer y YouTube.
El día de hoy los servicios de streaming son tan populares que han dejado atrás a la venta de música física (CD's). Las ventas de streaming se han disparado de los "mil millones de dólares en 2014 a cerca de los 3 billones en 2016" de acuerdo con la Asociación de Industria Discográfica de Estados Unidos.
A pesar de que la mayoría de los artistas más populares son parte de éstas plataformas, hay algunos que han decidido no dejar que su música este en ellas por la poca cantidad de dinero que se les paga por tener su catálogo en línea, un ejemplo de esto es la reconocida cantante Taylor Swift, quien finales de 2014, todos sus álbumes fueron retirados de Spotify y otros servicios de streaming de música en un cambio repentino en las políticas de la cantante ante la exposición de su trabajo. Cuando lanzaron el 1989 de Swift no estuvo disponible en Spotify, siguiendo la misma política utilizada en su álbum anterior Red. Sin embargo, un buen día eliminó por completo todo su repertorio anterior del servicio. Spotify dio la noticia en su blog e incluyó un posdata cariñoso pidiéndole que se quede: “Taylor, we were both young when we first saw you, but now there’s more than 40 million of us who want you to stay, stay, stay. It’s a love story, baby, just say, Yes.” Unos meses después, la cantante firmó un contrato con Apple Music y puso toda su música disponible para escucharse en el catálogo de Apple. "Apple treated me like I was a voice of a creative community that they actually cared about," dijo Taylor en una entrevista a Vanity Fair, y explicó que otros servicios de streaming no respetaban a los artistas pues no les daban una buena compensación por su música.
A pesar de todo esto, en el 2017 la cantante decidió poner de nuevo toda su música en dicha plataforma, desde que el stream ahora cuenta para las listas y un álbum puede ser #1 basado únicamente en transmisiones y no ventas físicas.
En el siguiente gráfico podemos ver como las ventas de música han cambiado a lo largo de los años:
Ahora si, pasando a lo más importante, esto es lo que paga cada plataforma a sus artistas por cada "play":
1,000 PLAYS stream en YouTube = $0.74
1,000 PLAYS stream en Spotify = $3.97
1,000 PLAYS stream en Google Play = $6,11
1,000 PLAYS stream en Deezer = $6,24
1,000 PLAYS stream en Amazon = $7,40
1,000 PLAYS stream en Apple Music = $7,83
1,000 PLAYS stream en TIDAL = $16,82
Imagen: The Trichordist
Esto es lo que pagan por cada millón de stream:
1 MILLÓN de streams en YouTube = $740
1 MILLÓN de streams en Spotify = $3.970
1 MILLÓN de streams en Google Play = $6,110
1 MILLÓN de streams en Deezer = $6,240
1 MILLÓN de streams en Amazon = $7,400
1 MILLÓN de streams en Apple Music = $7,830
1 MILLÓN de streams en TIDAL = $16,820
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